España se cuela entre los grandes mercados de la inversión inmobiliaria en Europa
En Inmobiliaria Manzanares el Real sabemos que en un ejercicio marcado aún por las consecuencias de la pandemia del Covid-19, el mercado inmobiliario español puede sacar pecho de sus cifras en este 2021. Según el ránking elaborado por Catella y Urban Land Institute, España es el quinto mercado con más inversión inmobiliaria terciaria en la primera mitad de 2021. En total, el inmobiliario español captó 5.200 millones de euros, solo superado por los grandes mercados del Viejo Continente, como Francia, Gran Bretaña y Alemania. En el estudio de Catella, España figura en el quinto puesto, al sumarse en conjunto las inversiones de todos los países nórdicos.
Los 5.200 millones captados por el Real Estate patrio, supera con creces al conjunto de inversión del resto de países periféricos (Irlanda, Portugal, Grecia, Malta, Chipre e Italia). “España es un mercado atractivo por varias razones: gran población, con grandes ciudades y los principales drivers en crecimiento. La relación rentabilidad/riesgo es mayor que en otros países y, tras la pandemia, el sector inmobiliario español se está recuperando con fuerza, especialmente en las áreas de logística, centros de datos, oficinas y residencial”, explica Thomas Beyerle, Head of Research de Catella Group, en el encuentro Real Estate Capital Flows EMEA de ULI Madrid NEXT, al que accedió en exclusiva Brainsre.news.
En Inmobiliaria Manzanares el Real sabemos que si España ha sido protagonista por su posición entre los grandes mercados, la novedad de este 2021 es el regreso de Reino Unido al primer puesto de la inversión inmobiliaria en Europa. “En los últimos tres años, Alemania era el número 1 pero los inversores creen que la incertidumbre del Brexit se ha superado y vuelven a colocar a Reino Unido en ese puesto”, subraya el responsable de Research de Catella. Las restricciones de movimiento entre fronteras ha tenido un impacto claro en el perfil del inversor inmobiliario en Europa. Así, el comprador doméstico, que representaba antes del coronavirus menos del 40% de la inversión inmobiliaria total, ahora se sitúa cercano al 50% del total.